Por VIX
La vida está construida por muchas decisiones, y hasta las más pequeñas influyen en tu futuro de maneras que desconoces. Por suerte, a través de la medicina y la dermatología, podemos tener una idea de cómo esas decisiones afectarán la salud de tu piel y la juventud de tu rostro. Hablamos de la alimentación y de cómo puede contribuir a la producción de colágeno en el rostro o disminuirla.
Los alimentos que eliges en tus comidas de todos los días pueden contribuir al surgimiento de líneas de expresión y pequeñas arrugas. Esto sucede porque algunas comidas pueden romper las estructuras de colágeno, responsables de la firmeza y la elasticidad de la piel. Con el paso de los años, todos vivimos una disminución natural en la producción de colágeno: se estima que después de los 25 años, se pierde cerca del 1 % del colágeno de la piel por año.
Evita estos 4 alimentos que disminuyen la producción de colágeno
Es verdad que existe cierto grado de envejecimiento que no podemos evitar. Pero lo podemos disminuir en gran parte, prestando atención a los alimentos que ingresamos a nuestro organismo. Una alimentación pobre en nutrientes afectará la producción de colágeno y favorecerá la aparición de líneas finas en el rostro.
Puedes comenzar a alimentarte de manera más sana, y no verás los efectos solamente en tu peso o en tu bienestar físico, también en tu rostro. Consumir alimentos frescos, como carnes magras, huevos, frutas y verduras de hoja verde potencian la producción de colágeno. Sin embargo, hay otros alimentos que desencadenan procesos inflamatorios en la piel y aceleran su envejecimiento. Si quieres mejorar el aspecto de tu piel, además de seguir una rutina de limpieza e hidratación diaria, deberías reducir el consumo de estos 4 alimentos:
Dulces y refrescos
Desde pan blanco, pasando por chocolate con leche, hasta ese vaso de bebida cola que tomas todos los días: en resumen, reduce el consumo de todo lo que tenga grandes cantidades de azúcar. El exceso de azúcar en el organismo no es metabolizado por el hígado y las moléculas de glucosa sobrantes se unirán a alguna proteína, que en el caso de la piel será el colágeno, lo que dañará su estructura (y, con ella, la elasticidad de la piel) y favorecerá la aparición de arrugas.
Como si fuera poco, el cuerpo identificará el colágeno como dañado y lo eliminará, por lo que la piel perderá una oportunidad para recuperarse, de acuerdo a Ava Shamban, profesora de dermatología de la Universidad de California en Los Ángeles, para Allure. También puede provocar inflamación y hacer que te salgan granitos. De acuerdo a la experta, la miel es el mejor endulzante, ya que está cargada de antioxidantes.
Alimentos fritos
Todo lo que haya sido freído en grandes cantidades de aceite exacerbará los procesos inflamatorios de las células de todo el cuerpo, de acuerdo a WebMD. En esto está incluida, por supuesto, la piel: así, esas papas fritas están destruyendo tu preciado colágeno y provocan la aparición de arrugas a temprana edad. Es importante reducir el consumo de frituras por esta misma razón, además de evitar comidas que tengan grasas trans o aceite vegetal hidrogenado. Puedes averiguar estos valores nutricionales en la etiqueta de cualquier alimento procesado.
Carnes grasas y procesadas
Las salchichas, el bacon y otros embutidos, en general, contienen altos niveles de grasas saturadas y de nitratos, dos ingredientes que contribuyen a la inflamación en todo el cuerpo, un proceso que culmina en el envejecimiento celular. La clave aquí es optar por carnes rojas magras u otras opciones, como pechuga de pollo.
Alcohol
El último alimento de la lista ni siquiera es un alimento, pero muchas personas lo consumen en exceso. El alcohol es uno de los más grandes responsables del desgaste de la piel: «es, de hecho, uno de los peores compuestos, de los más agresivos, que destruyen tu piel», explica para Vogue el nutricionista neoyorquino Jairo Rodriguez. El exceso de alcohol está clasificado como dos tragos por día o diez a la semana. «Si quieres envejecer, adelante, ¡bebe!», bromea el experto.
El alcohol, explica Rodriguez, deshidrata tu piel y la priva de los nutrientes que crean ese aspecto más lleno y brillante. También la inflama, al crear una reacción ante la histamina que deja tu piel rojiza. Estos dos procesos pueden contribuir en gran medida a la aparición de arrugas y líneas finas. De todos modos, según la Sociedad Brasileña de Dermatología, la excepción es el vino tinto: consumido de forma moderada, tiene acción antioxidante.
Las buenas noticias: a cualquier edad, tu piel puede regenerarse y recuperar buena parte de su elasticidad y su brillo natural. Puedes comenzar a cambiar hoy.
