Los 5 Consejos infalibles de Luigina Campos. La primera recomendación que brinda la experta es escoger un color ideal.

Por Revista MJ

¿Cuántas veces te ha pasado que no sabes que tipo de vestido es ideal para un evento?, ya sea para una boda, una graduación, una fiesta, una actividad empresarial o una social. Esta situación la viven muchísimas mujeres y llegan a sentirse incluso un poco abrumadas a la hora de seleccionar esta pieza. Por lo que, en este artículo te queremos comentar que no estas sola.

Luigina Campos experta en imagen sabe lo importante que es escoger el vestido ideal. Campos menciona: “La mayoría de mujeres que escogen un vestido incorrecto pasan incómodas durante toda la actividad. La ropa no es un tema superficial, está muy relacionado con nuestro ser interior y con cómo nos sentimos.” Es por eso que Luigina decidió crear una lista con 5 consejos claves para que las mujeres conozcan cómo elegir el vestido correcto para cada actividad a la que asisten; y dejen de lado todo ese estrés que les genera escoger esta pieza.

Campos comenta que “la imagen juega un papel muy importante en nuestras vidas no solo desde el punto de vista estético sino también en lo que queremos proyectar, por lo que siempre se debe elegir un look que vaya en armonía con la personalidad, con el tipo y hora de la actividad, con el color de piel y figura de la persona”.

“Esto, no solo ayudará a que la persona luzca acorde a la actividad, sino que traerá, además, beneficios psicológicos. Vernos bien es sentirnos bien, si usamos el vestido correcto, nos sentiremos con más confianza y seguridad,” agregó Campos.

Los 5 Consejos infalibles de Luigina Campos. La primera recomendación que brinda la experta es escoger un color ideal. Campos comenta que “si la persona no escoge el tono correcto para su tipo de piel podrá perder hasta un 90% del éxito de la selección del vestido y lucir apagada, sin ánimo e incluso verse sin vida; contrario a si escoge un color correcto ya que éste le aportará brillo, luz, vida, frescura y vitalidad”.

Entonces, la pregunta que surge es ¿Cómo saber elegir mi color? El primer paso es determinar cuáles son esos colores que te aportan más luz y frescura o por el contrario cuál de ellos te hace ver cansada y deteriorada. Luego, podés comparar por medio de dos telas una de color fucsia y otra en tono naranja, acercándolas al rostro, y ver la diferencia entre cada uno.

“Por ejemplo, si la fucsia te aporta luz, te ves fresca, radiante y jovial tu piel es más fría o por el contrario si la tela naranja te da estos mismos valores son más cálida. Y a partir de ahí podés escoger ya sean colores fríos o cálidos” indicó Campos.

Posteriormente, podrás determinar el grado de luminosidad que soporta tu piel, hay pieles que se ven mejor con tonos más opacos y otras con tonos más llamativos. El segundo consejo es el ajuste. Si la prenda no cuenta con un ajuste perfecto, ya esta perdiendo hasta un 80% en imagen en la pieza escogida.

“Si un ajuste es muy holgado hará que la persona se vea pasadita de peso, descuidada o si por el contrario el vestido es muy ajustado marcará áreas que no favorecen e incluso hacer ver vulgar a la persona. Es por ello, que el ajuste en el vestido debe ser perfecto, ya que esto estiliza y nos aporta elegancia”, señaló Campos.

Además, otro aspecto a considerar es la ocasión. A la hora de escoger un vestido debemos saber de antemano el código de vestimenta, si la actividad es de día, de noche, por la tarde. Si es en un hotel, una finca, playa, si es formal, informal, casual o si es a nivel profesional o personal, porque los códigos cambian.

Campos menciona que “si la actividad es casual se aconseja un vestido de tela ligera, fresca, sin apliques o brillo. Si es formal en noche podría se uno de gala, con brillo. Si es formal de negocios un vestido de corte clásico es la opción ideal. Pero, si se tiene una duda, es mejor consultar al organizador hora, lugar, tipo de evento y otros y a partir de ahí buscar la prenda”.

Otro consejo es tener claro el objetivo de comunicación, es decir, que quiero transmitir. Por ejemplo, si asisto una cena con la familia de mi novio quiero comunicar que soy una jovial, alegre o accesible, o deseo transmitir que soy una persona seria y centrada. De esta manera evitamos comunicar mensajes erróneos.

“También, a la hora de definir este objetivo es relevante no aparentar sino ser nosotros mismos”, señaló Campos.

Finalmente, el uso del estampado. Este se debe elegir de acuerdo con mi escala. Por ejemplo, si soy muy bajita o si tengo áreas más gruesitas los estampados grandes debo evitarlos. Además, los estampados grandes son para eventos más casuales y los estampados florales se reservan para bodas en la mañana y no se recomiendan para actividades profesionales, de negocios o de gala.

Campos concluye con que es fundamental buscar el modelo de vestido que cumpla con todas las características mencionadas ya que esto nos hará sentir cómodas y deslumbrantes.