La supervisión de los padres, así como la visita médica con el especialista en endocrinología pediátrica son imprescindibles para la detección de talla baja.
Por Revista MJ
El 2020 sin duda ha sido un año atípico y académicamente no ha sido la excepción, debido a la implementación del home
school; muchos padres dejaron de ver con claridad si sus hijos estaban creciendo a un ritmo adecuado. Asimismo, el poco uso del uniforme, impidió tener un control más preciso del tema. Por lo anterior, especialistas en endocrinología hacen un
llamado a que los padres estén alerta al correcto crecimiento de los menores durante las vacaciones de fin de año.
Un niño de estatura baja se refiere a cualquier menor que está por debajo del percentil. Los especialistas en crecimiento tienen en cuenta muchas cosas al evaluar el crecimiento. Por ejemplo, la estatura de los padres del niño son indicadores que muestran la altura que podrá alcanzar el pequeño cuando haya completado su crecimiento. Es muy probable que un hijo de padres que están por debajo de la estatura promedio también tenga una estatura inferior al promedio cuando sea adulto.
El crecimiento muy rápido o muy lento puede indicar una enfermedad o un problema glandular. La glándula pituitaria produce la hormona del crecimiento que estimula el desarrollo de los huesos y otros tejidos. Los niños que tienen una deficiencia de esta hormona, o sea que no producen suficiente, pueden tener baja estatura, entre otros. (Metabolismo ósea, composición corporal, fuerza y estructura del corazón).
La Doctora Maya Serrano, especialista en Endocrinología Pediátrica, egresada del Hospital Materno Infantil de Málaga, España explicó: “El ciclo escolar se vuelve clave para que los padres identifiquen alguna anomalía en el crecimiento de sus hijos, debido a que pueden comparar con regularidad la estatura que van teniendo. Este año que se estudió en casa y ahora que estamos de vacaciones, se debe prestar mayor atención al tema, puesto que el crecimiento de los niños está en manos de los padres de familia; ellos juegan un papel fundamental y es necesario que, sin dejar pasar tanto tiempo, acudan a visitas médicas regulares, aunque no se esté enfermo; especialmente en los primeros años de edad y durante la pubertad. Asimismo, que verifiquen que su estatura está acorde a la edad y estén atentos a aspectos como el cambio de talla de ropa y calzado”.
Es importante comprender que la talla baja no sólo se trata de tener una menor estatura, esta condición conlleva diversas afectaciones en la salud y la vida de los pacientes, barreras que enfrentan cotidianamente en su entorno social y que, incluso, pueden afectar su desenvolvimiento futuro.
Para identificar de manera rápida si el crecimiento de los menores es el ideal, se debe tomar como referencia la talla blanco familiar, que es el rango que resulta de sacar el promedio de la talla de ambos padres y adicionar hasta 6.5 cm en caso de
ser niño o restar 6.5 cm en caso de ser niña; no obstante, la estatura final también dependerá de otros aspectos como la alimentación, el ejercicio, su estilo de vida y enfermedades.
“Ante el panorama que estamos viviendo, los niños pasan más tiempo en casa, por ello es importante que se evite el sedentarismo, la mala alimentación y que los niños duerman fuera de su horario y por menos tiempo, ya que la hormona de
crecimiento se produce en mayor intensidad en el sueño profundo nocturno; es decir, cuando éste es de al menos de 9 a 11 horas continuas”, afirmó la Doctora Patricia Gálvez, especialista en Endocrinología Pediátrica de Pedias Inc.
La velocidad de crecimiento varía en cada persona, pero existe un promedio de crecimiento anual de 20 a 25 centímetros en el primer año de vida; de 10 a 15 centímetros entre los 2 y 3 años de edad; de 5 a 7 centímetros de los 4 a los 9 años
y de 8 a 12 centímetros durante la adolescencia.
Por lo anterior, ambas especialistas, comparten a continuación algunas recomendaciones para identificar si su hijo tiene algún problema de crecimiento:
- Monitorear el crecimiento de los niños. Realice una comparación con la ropa y calzado de hace 6 meses para conocer si el niño sigue creciendo.
- Talla blanco familiar. Es la talla heredada por los padres, la cual permite conocer el estándar de crecimiento de cada niño y hacer una proyección más precisa de su talla.
- Visita médica. Se recomienda consultar al endocrinólogo pediatra para que realice la exploración física y lleve un monitoreo adecuado del crecimiento de su hijo.
- Alimentación balanceada. Integre a su dieta diaria frutas, verduras y proteínas; evite que consuma comida chatarra y bebidas azucaradas.
- Actividad física. Realizar un deporte de moderada intensidad, por una hora diaria, mejorará el sistema de defensa además de regular la parte hormonal y mejorar la amplitud de la secreción de hormona de crecimiento.
- Cuidar los hábitos de sueño. La hormona de crecimiento se produce durante el sueño profundo, por lo que se recomienda contemplar al menos 9 horas para dormir.
Las especialistas en endocrinología pediátrica, destacaron que una vez que el médico realice el diagnóstico de talla baja e indique el uso de hormona de crecimiento, el apego al tratamiento será fundamental para obtener los resultados que acerquen a que el paciente logre su estatura ideal.