Las habilidades blandas están en peligro de extinción.
Por Revista MJ
En la actualidad, potenciar las habilidades necesarias para poder desarrollarnos como seres humanos funcionales del siglo XXI es fundamental, ya que las habilidades blandas nos forjan como personas y trabajar en ellas desde que somos niños hace una gran diferencia en el cómo afrontamos situaciones cotidianas a lo largo de la vida.
Las habilidades del siglo XXI son esas habilidades que nos permiten desenvolvernos de una forma positiva y exitosa en los diferentes contextos de la vida, estudio, trabajo, amigos y familia y al igual que las emociones, si son bien administradas, podremos, de forma asertiva, cumplir con los objetivos que nos propongamos en la vida.
En relación a este tema, Edunámica, fundación con más de 20 años de apoyar al país a niños y jóvenes de alto potencial con becas integrales para sus estudios y, además, desarrollarse en las áreas de sus talentos, brinda algunas recomendaciones para que los padres o encargados de los niños y adolescentes inviertan tiempo en potencializar las habilidades de sus hijos.
Azucena López, psicóloga de Edunámica afirma que “es muy importante equilibrar este potencial complementando con las habilidades como liderazgo, comunicación eficiente, identidad e inteligencia emocional para que de esta forma lleguen a ser una persona más integral”.
“La clave reside en fomentar un ambiente donde la inteligencia se fusione con la empatía y la comprensión. En primer lugar, es esencial validar y celebrar las habilidades intelectuales de su hijo, pero también resaltar la importancia de formarse en otras áreas.
“A menudo, se pueden incorporar actividades que promuevan la formación de estas habilidades desde la familia”, comentó López.
Según López, alentar, apoyar y motivar la participación en actividades grupales extracurriculares, como clubes, arte, deportes o proyectos comunitarios, proporciona oportunidades valiosas para desarrollar habilidades. Estas experiencias ayudan a los niños a comprender la importancia de trabajar en equipo, asumir liderazgo, comunicarse y relacionarse de una forma eficiente, así como la importancia de comprender sus emociones y regularlas.
López también indica que la empatía es una habilidad crucial que en Edunámica se le da especial relevancia, donde se practica además de la solidaridad, trabajo en equipo, comunicación, liderazgo y pueden cultivarse a través de la exposición a experiencias, así como participar en actividades voluntarias, donde se haga un bien a la comunidad o enfocado en cambiar la vida o las vidas de otras personas o incluso un impacto en el medio ambiente. La mejor forma de enseñar las habilidades es vivenciándolas.
“La comunicación abierta y constante en el hogar es fundamental, así como una disciplina positiva. Siempre recomendamos a los padres de los niños de alto potencial que estén dispuestos a escuchar las preocupaciones, intereses y motivaciones de su hijo o hija, apoyarlos en sus proyectos, animarlos a que participen de actividades extracurriculares o actividades que fomenten la formación de habilidades, validar sus emociones y sus gustos, hacerlos participes de las decisiones y brindar orientación sobre cómo enfrentar situaciones sociales desafiantes. Modelar un comportamiento social positivo y proporcionar retroalimentación constructiva contribuyen a fortalecer estas habilidades”, agregó López.
El viaje hacia el desarrollo de habilidades en niños de alto potencial intelectual es un proceso continuo y gratificante, con paciencia, constancia y apoyo. Edunámica motiva a los padres de niños y jóvenes de alto potencial a involucrarse en estos procesos ya que será clave en el futuro de sus hijos o hijas.