Por MJ Revista
¿Sabía que el color de la ropa que vestimos influye en nuestro estado de ánimo, en la impresión que damos e incluso, es un elemento clave de la imagen profesional? ¿Ha escuchado hablar de la terapia del color?
De acuerdo con la experta en imagen, Luigina Campos, el color es un elemento muy importante de la imagen externa e interna, que puede transformar totalmente la manera en la que las personas se proyectan y se sienten día a día, por lo que está siendo utilizado cada vez más en áreas como la construcción de imagen, la psicología, terapia, entre otros.
“Aunque muchas personas pueden no darle la importancia requerida, existe toda una psicología de color que, junto con la cromoterapia, afirma que los colores que utilizamos tienen facultades impresionantes que activan nuestro sistema nervioso, emiten estímulos, influyen en el estado de ánimo y crean una percepción de cómo somos ante los demás. Así que, debemos aprender a usar el color a nuestro favor y por eso es que hoy existe la asesoría del color, como un elemento fundamental de la imagen, que se preocupa no solo por el aspecto exterior, sino también por la autoestima y el bienestar interno”, explicó la experta.
De esta manera, el color va más allá de generar un efecto en la piel y el rostro, sino que, también, incide en el estado de ánimo y puede ser decisivo en situaciones particulares, como por ejemplo, en una persona con depresión o con alguna enfermedad que afecte su autoestima, o bien, en un profesional que puede enfrentar mejor un reto, al aprovechar el poder del color en su imagen.
¿Qué color usar para cada ocasión? En cuanto a estados de ánimo, incorporar el color verde en el guardarropa ayuda a armonizar y alcanzar el equilibrio; el negro puede incrementar la tristeza, el azul ayuda a aumentar la productividad y reducir la presión arterial pues genera calma; mientras que el naranja es ideal para quienes se sienten tristes pues produce alegría, entusiasmo y ayuda a proyectarse con más vitalidad.
También, la experta recomienda considerar el uso del color rojo, pues para aquellas personas que están cansadas de la monotonía o que se sienten estancadas, el rojo genera una sensación de fuerza, presencia y pasión que puede transformar el día a día.
Imagen profesional y color. Finalmente, a nivel profesional el color también es muy importante.
“A través del diseño que compone al color, emitimos estímulos a los demás, los cuales deberán ser coherentes con el objetivo trazado y el entorno a nivel profesional, pues si esto no sucede, fácilmente se podría perder la credibilidad. Sin duda, pensar en este aspecto puede darnos una ventaja competitiva y debería usarse pensando en la industria en la que se desenvuelve el profesional, el objetivo y la prioridad del mensaje”, explicó Campos.
Los colores más recomendados en entornos profesionales son los verdes, naranjas, blanco, rojo y el azul.
“El verde y el naranja son ideales para personas que trabajan en publicidad, industrias de moda, áreas creativas y para quienes trabajan con niños. Mientras tanto, el negro y el gris son la opción ideal para quienes trabajan en una industria más rígida y con códigos más estrictos, ya que transmiten autoridad, liderazgo y madurez”, agregó.
Además, no solo se trata de escoger el mejor color, sino de saber cómo combinarlo, pues la experta indicó que usar mucho un mismo color puede ser excesivo y crear el efecto contrario, por lo que, colores más rígidos como el negro se pueden combinar con blanco o rojo, para crear balance y accesibilidad, o bien dinamismo, respectivamente, sin perder la credibilidad.
“Para terminar, el azul es uno de los colores más recomendados en el ámbito profesional, pero dependerá el tono del mismo. Si se desea parecer más autoritario pero seguro y profesional al mismo tiempo, el azul oscuro es la mejor opción. Ahora bien, para ambientes más accesibles, el azul rey o eléctrico aporta lo necesario para vernos modernos y profesionales a la vez”, concluyó.