Cómo deslumbrar y lucir radiante en el Día de San Valentín
Limpiar la cara, por la mañana y por la noche, al acostarse y levantarse, eliminará de la piel aquellas sustancias externas agresivas
Por Mamá Joven
El día más romántico del año se encuentra a la vuelta de la esquina. El 14 de febrero es el día elegido por muchos para sorprender y enamorar aún más a su pareja. ¿Quieres que este San Valentín sea especial y único? ¿Deseas deslumbrar y lucir radiante el Día de los Enamorados? Para conseguirlo, la farmacéutica y bloguera de belleza y salud, Meritxell Martí, autora del libro“Vivir Sano, Sentirse Bien”, nos ofrece los mejores trucos para sentirnos espectaculares el 14 de febrero. Recomendaciones para estar radiante e impresionar a tu pareja Dicen que la mirada es el espejo del alma, por lo que lucir una piel sana y, a la vez, bonita será el mejor de los reflejos. Tal y como señala Meritxell Martí en su libro “Vivir Sano, Sentirse Bien” debemos cuidarnos diariamente para que nuestra piel luzca suave, hidratada y joven.
- Para lucir un rostro bello, se deben seguir los siguientes pasos básicos:
- Limpiar la cara, por la mañana y por la noche, al acostarse y levantarse, eliminará de la piel aquellas sustancias externas agresivas.
- Si se ha utilizado maquillaje, es obligatorio eliminarlo, pues si no los pigmentos y componentes químicos que contienen determinados productos permanecerán en el rostro.
- Después de la limpieza, se debe hidratar, nutrir y tratar a la piel con los activos más adecuados que se precise según su estado. Con la hidratación, se logrará dar humedad y elasticidad al rostro.
- Si se tiene fisuras en alguna parte del cuerpo, como en manos o pies, es muy recomendable usar una crema nutritiva, con activos como la lanolina, el aceite de argán o la manteca de karité.
- Para finalizar, no se debe olvidar la exfoliación. Resulta efectivo seguir este último paso, al menos, una vez a la semana.
- Si eres hombre y el aspecto físico también te importa, existen una serie de cuidados específicos masculinos:
- Al tener, por lo general, pieles grasas, conviene que los hombres se limpien por la mañana y por la noche. La exfoliación mecánica –frotando con un producto tipo scrub– debe realizarse antes del afeitado y exfoliaciones con ácidos, como el glicólico o el salicílico, son recomendables realizarlas antes de acostarse.
- El segundo paso esencial de la higiene masculina es el afeitado. Resulta imprescindible la espuma o el gel, para ablandar el vello y que el afeitado sea suave. Se debe tener especial cuidado con la calidad de las hojas utilizadas, pues cuchillas viejas o en mal estado podrían provocar cortes o lesiones en la piel.
- Tras el afeitado, se deben eliminar los restos de espuma o jabón. Para ello, el agua fría será muy útil. Después, pueden utilizarse productos calmantes o hidratantes.
- Existes decenas de cosméticos específicos para hombres. Lo importante es conocer el tipo de piel –seca, mixta o grasa- y utilizar los productos y tratamientos que mejor se adecuen a su estado.