Las habilidades del infante para comer y alimentarse solo se desarrollan con el tiempo y de forma progresiva de su crecimiento, por lo que necesitará los utensilios adecuados

Por Carolyn Hernández

Ya sea que el niño esté probando alimentos sólidos o líquidos por primera vez, debe tener los platos, cubiertos y tacitas diseñados para su función específica, además de ser aprobados por pediatras. Los materiales recomendados son goma y melamina.

“Así como el menor comienza a experimentar con utensilios para alimentarse, los padres deben acompañarlo en el proceso y guiarlo en la adecuada manipulación. Por ejemplo, cuando comen cereal, con el uso adecuado de la cucharita; o cuando toman leche, en el uso del biberón”, explicó Rosa Oviedo, experta en temas infantiles de la cadena de tiendas Babyboom.

Según Oviedo, entre las consideraciones a la hora de invertir en implementos para una alimentación líquida se debe considerar que sean fáciles de tomar con las manos y antiderrames, lo cual ayudará a que el niño no se sienta frustrado en su proceso de adaptación.

Facilitando el proceso

Entre las innovaciones para bebés están las boquillas de plástico suave. Estas hacen más fácil la transición del pecho de la madre hacia el chupón. Asimismo, el brillo y colorido atraen la atención de los niños. También hay con boquillas más duras para niños pequeños.

Es importante que los padres compren artículos elaborados de melamina, que son más durables, pueden lavarse como cualquier otro y si el niño lo tira en el suelo, no hay peligro.

En el caso de los cubiertos, los diseñados con punta cubierta de goma son los idóneos, ya que no lastiman las encías del infante; también los de mango ancho o curvo porque son más fáciles de agarrar. Los diferentes colores y diseños son de gran ayuda para que el menor se sienta atraído y se familiarice mientras aprende a comer.

“Poco después de los seis meses, es probable que el niño quiera sostener su propia cuchara, pero pasarán unos cuantos meses antes de que su coordinación se haya desarrollado lo suficiente para llevar comida del plato a su boca con cubiertos”, explicó Oviedo.

Es normal que al inicio del proceso de aprendizaje el niño bote la comida o riegue los líquidos, pero con el tiempo se notará la mejora en su motora gruesa (disposición a cosas grandes y diversas texturas) y motora fina (precisión).

Si bien no hay reglas establecidas, es importante que los padres tomen en cuenta la edad del menor, la inversión, diseño y calidad de los utensilios, sin dejar de lado el consejo de los expertos, con el objetivo de realizar una compra inteligente.