El riesgo de padecer cáncer de cabeza y cuello aumenta a medida que la gente envejece.
Por Revista MJ
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en el 2022, el cáncer continúa siendo la principal causa de muerte en el mundo 1 . Y de acuerdo con datos publicados recientemente por el Instituto Nacional de Estadística y Censos de Costa Rica 2 , el cáncer es la segunda causa de muerte en el país.
Frente a esta realidad, en el marco del Día Mundial de concienciación sobre el cáncer de cabeza y cuello es importante educar a la población sobre estos tipos de cánceres, detección, diagnóstico y tratamientos disponibles para combatir esta enfermedad.
Con el nombre de cáncer de cabeza y cuello se conoce al conjunto de tumores malignos que suele tener su origen en las células escamosas que recubren las superficies de la mucosa de la cabeza y el cuello (por ejemplo, las del interior de la boca, la garganta y la laringe) 3 . Sus síntomas van desde un bulto en el cuello; una llaga en la boca o en la garganta que no sana y duele; hasta dolor de garganta que no desaparece; dificultad para tragar; y cambio o ronquera en la voz.
Los cánceres de cabeza y cuello se clasifican según el tamaño y el lugar en el que se originan: 5 Los tipos más comunes son:
Cáncer de cavidad bucal: empieza en la boca.
Cáncer orofaríngeo: comienza en la parte de atrás de la boca o en la garganta.
Cáncer nasal: comienza en la abertura detrás de la nariz, un espacio que va por encima del paladar y luego desciende hasta unirse a la parte de atrás de la boca y de la garganta.
Cáncer de seno paranasal: comienza en las aberturas alrededor o cerca de la nariz denominadas senos.
Cáncer nasofaríngeo: comienza en la parte de arriba de la garganta, detrás de la nariz.
Cáncer de laringe: comienza en la zona de la laringe.
Cáncer hipofaríngeo: empieza en la parte baja de la garganta, al costado y detrás de la laringe.
Principales factores de riesgo
La incidencia del cáncer aumenta muchísimo con la edad, muy probablemente porque se van acumulando factores de riesgo de determinados tipos de cáncer. A esta acumulación global se suma la pérdida de eficacia de los mecanismos de reparación celular que suele ocurrir con la edad. Razón por la cual el riesgo de padecer cáncer de cabeza y cuello aumenta a medida que la gente envejece. La mayoría de estos, son diagnosticados en personas mayores de 45 años y son más frecuentes en los hombres que en las mujeres.
Los dos factores de riesgo más importantes del cáncer de cabeza y cuello se asocian al consumo de alcohol y tabaco. El uso de cualquier tipo de tabaco, como cigarrillos, pipas, mascar tabaco y cigarros, puede aumentar el riesgo de padecer este tipo de cáncer. 9 Por otro lado, el 70 % de los casos de cáncer en la orofaringe (que incluye las amígdalas, el paladar blando y la base de la boca) se asocia al virus del papiloma humano (VPH), que es un virus común de transmisión sexual. 10 Este es el mismo virus que puede causar cáncer de cuello uterino y otros tipos de cáncer.
“Los principales factores de riesgo asociados al desarrollo del cáncer de cabeza y cuello también se asocian a la aparición de otras enfermedades tanto oncológicas como no oncológicas. Conocer estos factores de riesgo permite tomar medidas como parte de un estilo de vida saludable, en busca de prevenir su aparición en muchos casos”, dijo el doctor Christian Hernández Mena, médico del Hospital La Católica.
Para reducir el riesgo de padecer cáncer de cabeza y cuello se recomienda dejar de utilizar todos los productos tabacaleros, evitar el exceso de alcohol y prevenir una infección de VPH a través de la vacunación. La vacuna contra el VPH es más eficaz cuando se administra antes de exponerse al VPH. En la actualidad, la vacunación se recomienda para niñas y niños, adolescentes y adultos jóvenes. Una buena higiene dental también puede reducir el riesgo de padecer cánceres de cabeza y cuello.
¡A tiempo! Detección y tratamiento
Estos tipos de cánceres podrían pasar desapercibidos hasta que comienzan a ocasionar problemas que llevan a la persona a consultar a un médico. En ocasiones se detectan cambios durante consultas de rutina con el médico o el dentista.
En la actualidad se puede evitar entre el 30% y el 50% de los casos de cáncer reduciendo los factores de riesgo y aplicando estrategias preventivas basadas en la evidencia. Además, esta carga se puede reducir mediante la detección precoz y la atención y el tratamiento adecuado de los pacientes. Si se diagnostican a tiempo y se tratan oportunamente, las probabilidades de curación de muchos tipos de cáncer son elevadas.
Las visitas de rutina al médico especialista son esenciales para la detección y el tratamiento temprano.
Opciones terapéuticas para el tratamiento de cáncer de cabeza y cuello
El tratamiento del cáncer de cabeza y cuello puede incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia dirigida, inmunoterapia o una combinación de tratamientos. El plan de tratamiento para cada paciente depende de varios factores, incluso la ubicación del tumor, el estadio del cáncer, la edad y la salud general de la persona.
Con frecuencia, se usan muchos tipos de tratamientos juntos, por ejemplo, cirugía seguida de radioterapia o radioterapia combinada con quimioterapia. El manejo del cáncer de cuello y cabeza suele requerir de un equipo de médicos y otros profesionales, incluidos nutricionistas/dietistas y terapistas del habla y del lenguaje.
En las últimas décadas, la inmunoterapia se ha convertido en una parte importante del tratamiento de algunos tipos de cáncer, ya que es un tratamiento que estimula las defensas naturales del cuerpo, ayudando al sistema inmune a aumentar su eficacia para detener o retardar el crecimiento de las células cancerígenas, evitando así que se extienda.
“El cáncer de cabeza y cuello en estadios avanzados presenta un riesgo alto de recaída. Durante muchos años el tratamiento de estos pacientes se mantuvo sin grandes novedades, limitando así las opciones que los médicos podíamos brindar. La llegada de la inmunoterapia permite incrementar el arsenal de opciones terapéuticas en pacientes con lesiones avanzadas en cabeza y cuello, ofreciendo mejores resultados que los tratamientos tradicionales o incluso convirtiéndose en la única opción de tratamiento”, finalizó el doctor Hernández Mena.