Diabetes y enfermedad renal: ¿cómo evitarlo?

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La diabetes puede ser un detonante de otras enfermedad. Por eso, medidas como monitorear y controlar la glucemia y la hipertensión es crucial para evitar ciertas complicaciones.

Por Revista MJ

La enfermedad renal crónica (ERC) es irreversible una vez establecido y afecta al 40% de los pacientes que viven con diabetes así que la detección temprana y el control de glucemia son esenciales para evitar la progresión de esta enfermedad.

La enfermedad renal no solo progresa rápidamente hasta el punto en que los pacientes necesitan diálisis, sino que también está asociada con un alto riesgo de problemas cardiovasculares.

Con una prevalencia en Costa Rica de ERC del 14.75% y una tasa de mortalidad de 5.62 por cada 100 mil habitantes, la ERC representa un desafío significativo para la salud pública. Los síntomas suelen ser silenciosos en las etapas iniciales, por lo que es imprescindible el monitoreo regular de la función renal.

«Es esencial contar con nuevos tratamientos que no solo controlen la glucosa, sino que además demuestren proteger el riñón, evitar la progresión a insuficiencia renal y proteger el corazón de las personas que viven con diabetes tipo 2, para así ayudar a que los pacientes gocen de una mejor calidad de vida», comenta la Dra. Ileana Chiari-Shan, directora de asuntos médicos, regulatorios y de calidad de Novo Nordisk.

5 recomendaciones de oro para pacientes con diabetes:

● Monitorear su función renal: Realizarse análisis de sangre y orina de manera periódica, especialmente si se tienen factores de riesgo como diabetes o hipertensión, permite detectar precozmente cualquier problema renal y tomar medidas a tiempo.

● Dieta saludable y personalizada: Seguir una dieta equilibrada, baja en sodio, potasio, fósforo y proteínas, es fundamental para controlar los niveles de electrolitos y minerales en la sangre. Es crucial seguir las recomendaciones del nefrólogo y el nutricionista para cada etapa de la enfermedad renal.

● Actividad física regular: Realizar ejercicio de manera regular, según la tolerancia y recomendación médica, ayuda a mantener un peso saludable, mejorar la circulación sanguínea y el estado de ánimo. Incluso actividades suaves como caminar, bailar o jardinería pueden ser beneficiosas hacer ejercicio regular, mantener un peso saludable, evitar el alcohol y el tabaco.

● Tomar medicamentos según lo indicado: Ciertos medicamentos como antiinflamatorios y analgésicos, si se consumen en exceso y sin prescripción médica, pueden dañar los riñones, por lo que siempre se debe contar con orientación de un profesional de la salud.

● Estar atento a signos de alarma: Reconocer síntomas de deterioro renal y consultar al médico ante cualquier cambio. Los síntomas de la ERC en sus fases avanzadas se incluyen fatiga persistente, dificultad para dormir, náuseas, hinchazón en extremidades y dificultad para respirar. Signos de alerta temprana son la necesidad aumentada de orinar y la presencia de proteínas en la orina.

Fuente: National Kidney Foundation (Fundación Nacional del Riñón)

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