¡Enseñe a sus hijos a ser responsables con el dinero!

Sep 9, 2025 | Madre, Noticias Recientes

Editor Mama Joven

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Educar con el ejemplo, dar mesada como herramienta y fomentar el ahorro con metas son claves para que los niños aprendan a manear el dinero.

Por Revista MJ

La infancia es la etapa ideal para sentar bases sólidas en torno al uso responsable del dinero, pues los aprendizajes adquiridos en casa se proyectan en la vida adulta y pueden marcar la diferencia entre relaciones sanas o problemáticas con las finanzas. Por ello, en el marco del Día del Niño y la Niña, la Asociación Bancaria Costarricense (ABC) hace un llamado a las familias costarricenses para asumir un rol más activo en la formación financiera de sus hijos.

Daniela Gutiérrez, economista de la ABC, explicó que los niños aprenden de manera natural observando lo que hacen sus padres o encargados: “La niñez presta atención a la forma en que los adultos manejan sus recursos. Cuando ven que se elabora un presupuesto, que se ahorra para una meta o que se posterga un gasto innecesario, están internalizando valores de disciplina y responsabilidad que llevarán consigo en el futuro”.

Según la experta, la educación financiera en la niñez no debe abordarse como un tema técnico ni complejo, sino como un aprendizaje cotidiano que surge en la dinámica familiar. “No se trata de impartir clases formales sobre finanzas, sino de permitir que los niños participen en conversaciones y decisiones acordes a su edad. Lo importante es que comprendan que el dinero no es un tabú ni un motivo de angustia, sino una herramienta que, bien utilizada, puede acercarlos a sus metas”, comentó Gutiérrez.

La ABC recomienda varias prácticas que los padres pueden poner en marcha desde edades tempranas. Una de ellas es la mesada educativa, que permite a los niños experimentar con un ingreso fijo y limitado.

Cuando los hijos administran una cantidad estable de dinero aprenden a planificar y a decidir. Si gastan todo en un solo día, descubren las consecuencias de no prever; si ahorran con constancia, experimentan la satisfacción de alcanzar sus objetivos, lo que da como resultado un ejercicio que les da independencia y criterio.

Otro hábito valioso es fomentar el ahorro con metas específicas, pues esto ayuda a que los niños comprendan la relación entre esfuerzo y logro. Por ejemplo, si un niño desea una bicicleta, los padres pueden guiarlo para que defina cuánto debe ahorrar cada semana y cuánto tiempo tardará en alcanzarla.

Una tercera buena práctica para inculcar el ahorro en edades tempranas es involucrarlos en decisiones de consumo, ya que esto contribuye a desarrollar un pensamiento crítico frente al mercado. Esto se puede hacer, permitiéndoles participar en compras pequeñas, que comparen precios o que distingan entre productos similares les enseña a diferenciar entre deseos y necesidades. Con ello aprenden que no siempre se puede adquirir todo lo que se quiere y que el dinero debe administrarse con inteligencia.

Para la Asociación Bancaria Costarricense, estos hábitos tempranos tienen un efecto acumulativo que trasciende la niñez. La práctica de la disciplina, la organización y el autocontrol frente al dinero se traduce, en la adultez, en personas menos propensas a caer en sobreendeudamiento y más capaces de utilizar el crédito de forma responsable, de planificar para su retiro o de emprender proyectos personales y profesionales con mayor seguridad.

La ABC insiste en que el Día del Niño y la Niña nos recuerda que invertir tiempo en la educación financiera de nuestros hijos es también invertir en su bienestar futuro. El hogar es, sin duda, el primer espacio de aprendizaje, y es ahí  donde se cultivan las habilidades que acompañarán a los jóvenes a lo largo de su vida.

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