Se estima que en nuestra boca viven 20.000 millones de bacterias y cada día que pasa sin que nos cepillemos los dientes ahí se mudan millones de nuevas bacterias dispuestas a hacer de las suyas.

Por Malte Holm / Clínicas Dentales Sonríe

Con frecuencia escucho la pregunta: ¿qué debo de hacer para evitar problemas con mis dientes? Es una excelente interrogante, ya que he podido observar que poca gente conoce los cuidados básicos que se necesitan para mantener una buena higiene oral y así lograr evitar lesiones de caries, mal aliento y enfermedades más graves. Además, se estima que en nuestra boca viven 20.000 millones de bacterias y cada día que pasa sin que nos cepillemos los dientes ahí se mudan millones de nuevas bacterias dispuestas a hacer de las suyas.

A continuación enumero los factores que se deben tomar en cuenta para la prevención del cuidado de los dientes y por ende, de la salud bucal:

Dieta el factor clave para el cuidado dental

En lo que se refiere a caries, cavidades y agujeros en los dientes la clave está en la dieta y en la frecuencia de exposición al azúcar. Por ello, se recomienda comer frutas y verduras de consistencia dura como zanahorias, manzanas, apio, pepino y broccoli las que también complementan los cuidados de los dientes. Esto requiere mínima preparación diaria, y es un buen snack para llevar en la lonchera.

Lavar los dientes después de cada comida

Esto es básico, y todo el mundo sabe que es importante lavarse los dientes. Lo que no todos saben a detalle es que es recomendable lavar los dientes después de cada comida, aunque lo ideal es esperar media hora antes de hacerlo. Para ello, busque una pasta de dientes con una cantidad razonable de flúor (ideal entre 1350 y 1500 ppm (partes por millón)), un dato que se debe observar en un empaque, ya que ayuda a fortalecer los dientes y así prevenir enfermedades.

Además, se debe cambiar el cepillo con frecuencia para que esté en buen estado siempre. Estudios han demostrado que después de 3 meses de uso regular, un cepillo es menos efectivo para remover la placa de los dientes y de las encías, en comparación con un cepillo nuevo. Las cerdas pierden resistencia y por consiguiente efectividad para llegar a las áreas difíciles de alcanzar alrededor de los dientes.

Para prevenir que los virus y bacterias se transmitan entre los cepillos, trate de evitar que éste esté en contacto con otros. Un cepillero regular con orificios para colocar varios cepillos en forma vertical, es una inversión que vale la pena tener por la salud de su familia.

Usar hilo dental

Es importante mencionar que la mayoría de las personas gente no utiliza el hilo dental con frecuencia, y casi siempre es porque se les olvida. El hilo ayuda a quitar restos de comida, y en especial entre los dientes y por las encías. Se sugiere dejar el hilo en un lugar visible, y buscar la presentación que mejor le funcione y su empleo no debería quitar mucho tiempo. La prevención le puede ahorrar tiempo y dinero.

Limpieza periódica, flúor y sellantes

La opción de la limpieza profesional periódica no debe de quedar fuera de los planes de cada persona, ya que el cepillo no logra eliminar toda la placa bacteriana. Una buena limpieza completa debe incluir la eliminación de sarro, placa bacteriana y manchas, donde el último paso es la aplicación de flúor para fortalecer los dientes.

Por otro lado, los sellantes también son una excelente opción para prevenir ya que sellan las fisuras naturales en los dientes, evitando así la acumulación de restos de comida.

Los hábitos para el cuidado de la dentadura empiezan a desarrollarse a partir del cuarto mes, es decir, cuando deja la lactancia y empieza a tomar papillas y otras comidas. A esa edad es cuando el niño le nace el primer diente; el tipo de comida que se le dé puede afectar a su salud dental durante toda la vida. Se ha determinado que hay una correlación entre el consumo de bebidas azucaradas durante la infancia y el consumo posterior de alimentos con gran contenido de azúcar. Por ello, es importante realizar los cuidados anteriormente citados de forma correcta le puede evitar problemas serios de salud, y son buenos hábitos que mantendrán su boca en óptimo estado, evitando así las caries y el mal aliente.