Factores como niveles elevados de colesterol, sobrepeso, embarazos y tratamientos hormonales pueden incrementar el riesgo de padecer esta condición.
Por Revista MJ
Los trastornos biliares son comunes en la población costarricense, con una alta incidencia en mujeres y personas mayores de 40 años. Según datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), en 2013 se realizaron 9.137 colecistectomías (cirugías de extirpación de la vesícula biliar), de las cuales el 76% correspondieron a mujeres.
La enfermedad biliar más frecuente es la colelitiasis, que se refiere a la formación de cálculos en la vesícula biliar, lo que comúnmente conocemos como piedras en la vesícula. Esta patología puede obstruir los conductos biliares, causando dolor intenso y complicaciones graves como colecistitis, pancreatitis o colangitis.
Factores como sobrepeso, pérdida acelerada de peso, embarazo, tratamientos hormonales y ciertas discrasias sanguíneas pueden incrementar el riesgo de padecer esta condición. Algunos síntomas como dolor abdominal persistente, náuseas, vómitos, distensión o problemas digestivos similares a colitis y gastritis, pueden ser señales de afecciones biliares.
Prevención y diagnóstico temprano
Adoptar hábitos saludables como una alimentación balanceada baja en grasas, mantener un peso adecuado y realizar chequeos médicos periódicos es clave para identificar factores de riesgo y prevenir complicaciones.
«Es fundamental que las personas presten atención a síntomas como dolor abdominal y problemas digestivos recurrentes. Un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia entre un tratamiento sencillo y una cirugía de emergencia», afirmó la Dra. Silvia Garita del Programa Sana Sana.
El Programa Sana Sana ofrece evaluaciones médicas preventivas que permite diagnosticar a tiempo cualquier anomalía en la vesícula biliar. Estas valoraciones incluyen estudios de laboratorio y ultrasonidos principalmente, que pueden ayudar a un diagnóstico temprano y a evitar complicaciones quirúrgicas. Una cirugía electiva no garantiza, pero disminuye las posibilidades de complicaciones frente a una cirugía de emergencia. Con el apoyo y la guía de un médico en todo momento, un paso a paso en la salud, enfatizó Garita.
Las personas que son parte del Programa Sana Sana, además de los servicios médicos, contarán con el acompañamiento de profesionales altamente capacitados y con los más altos estándares de servicio.