Se trata del uso de la tecnología, por medio de un procedimiento personalizado, en el que se combate el envejecimiento desde su origen y corrige sus efectos visibles en cada etapa de la vida.
Por Revista MJ
Desde hace muchísimos años, la ciencia se ha convertido en uno de los principales aliados de la industria farmacocosmética. La muestra más reciente de ello es el tratamiento Age Element con la tecnología [meso]Epigen system™️ patentada por el laboratorio farmacéutico Mesoestetic, el primer complejo con acción epigenética demostrada y avalada por estudios in vivo e in vitro y que destaca por su formulación personalizada.
Las condiciones del entorno, las experiencias y el estilo de vida son los principales activadores de mecanismos epigenéticos, además de que son promotores y aceleradores de los principales signos visibles de la edad siendo estos los principales causantes del envejecimiento cutáneo. Los últimos avances científicos permiten actuar sobre estos cambios epigenéticos y resincronizar los procesos naturales de protección y reparación de la piel.
En Costa Rica, Face & Body Care Center, ubicado en Avenida Escazú, se mantiene a la vanguardia con la aplicación de esta novedosa técnica que combate el envejecimiento desde su origen, ya que modula los mecanismos epigenéticos para que la piel recupere su actividad regenerativa y proliferativa. A ello se suma que corrige los efectos visibles del envejecimiento al proporcionar una piel más firme, luminosa y visiblemente más joven.
El tratamiento Age Element es un protocolo antiedad integral, en el que con cada sesión se buscan crear experiencias únicas con fórmulas eficaces y sensoriales. Esto se desarrolla en cinco fases: diagnóstico para analizar las variables que intervienen en el proceso de envejecimiento y así definir un protocolo personalizado para cada paciente, mientras que la segunda fase es de preparación y la tercera estimulación.
La cuarta etapa es la activación, con la que se busca la aportación personalizada en función del grado de envejecimiento y los signos visibles de la edad en la piel, potenciando la luminosidad, la firmeza, disminuyendo las arrugas y aportando densidad. Por último, está la fase de potenciación personalizada, que brinda un extra de activos complementarios a los utilizados en la fase de activación.
“La innovación tecnológica y los avances científicos están cambiando el sector de los tratamientos antiedad. En este procedimiento en específico logramos implementar una serie de mecanismos que contribuyen a la regeneración celular, potenciando la producción de proteínas esenciales y la longevidad de las células. Con eso la persona lucirá una piel mucho más luminosa y firme”, explicó el Dr. Miguel Ángel Chavarría, director médico de Face & Body Care Center.
